miércoles, 29 de septiembre de 2010

Dicotomía incruenta

Siempre llega mi mano
más tarde que otra mano que se mezcla a la mía
y forman una mano.

Cuando voy a sentarme
advierto que mi cuerpo
se sienta en otro cuerpo que acaba de sentarse
adonde yo me siento.

Y en el preciso instante
de entrar a una casa,
descubro que ya estaba
antes de haber llegado.

Por eso es muy posible que no asista a mi entierro,
y que mientras me rieguen de lugares comunes,
ya me encuentre en la tumba,
vestido de esqueleto,
bostezando los tópicos y los llantos fingidos.
. · .Oliveiro Girondo. · .

jueves, 2 de septiembre de 2010

Consuta...

¿De qué sirve tener voz?

¿De qué sirve tener las
herramientas y no poder usarlas?
¿Puede decirse que el Método
Gronholm es el reflejo del salvajismo que ejecuta el sistema?
¿Hasta dónde es real que existe la libertad?
Si nada de eso existe,
si nada de eso es real,
si todo es susceptible de ser cuestionado.
Entonces,
¿De qué sirve tener voz
si no te dejan escribir,
si no te dejan decir?
¿Qué podés hacer frente a personas
que quieren hacerte creer
--y hacen creer a los demás--
que la
realidad es puramente
vana,
que instalan prejuicios
y estereotipos que no sirven para nada,
que sólo alientan a la desestimación
de unas personas sobre otras?

¿Puede decirse que esas personas
fueron subsumidas por el sistema?

¿Qué hacés?
¿Cómo te rebelas?
¿Qué hacés si te callan?