Es como sentir el peso del mundo en el cuello y en la espalda, que te aprietan los zapatos y no te dejan caminar del todo bien. Hacen que camines así, que te veas así…Tan ínfimo. Inexistente. Un algo que no sabes de dónde viene ni por qué. Ni se hace presente en los momentos en que te despejás…Pero un segundo que olvidaste lo que estabas haciendo es demasiado tiempo como para que se renueve esa sensación de pesadumbres que llega a desvelarte por noches enteras. Se amarra a tu pecho y se caen tus ojos. Se caen tus ojos y te pesan los brazos. Te pesan los brazos y vuelan ráfagas de viento en camino contrario que montan de una vez un nuevo escenario, pero te aprietan los zapatos --no puedo más--. Decidís quitártelos. Aunque analizás una posible desprotección: no hay nada que te recubra los pies. Inhalas. Profundo, muy profundo. De alguna forma, te erguís. Oís el dulce sonido del mar. Continuás tu rumbo sin dar la vuelta hacia atrás.
Y sonreís.
--No hay en qué pensar--.
(...)
"Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
***
Al andar se hace camino
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar. "
(...)Cantares de:
Antonio Machado.
2 comentarios:
"Creo esta noche en la terrible inmortalidad:
ningún hombre ha muerto en el tiempo, ninguna mujer, ningún muerto
porque esta inevitable realidad de fierro y de barro
tiene que atravesar la indiferencia de cuantos estén dormidos o muertos
aunque se oculten en la corrupción o en los siglos
y condenarlos a vigilia espantosa.
Toscas nubes color borra de vino infamarán el cielo;
amanecerá en mis párpados apretados".
Me encantó lo de Kaleidoscope Eyes. Tan Lennon.
Pero es Machado, él lo puede todo. En cuanto a lo otro... no podemos hacer nada somos simples mortales jugando a ser dioses.
Saludos
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